El bosque

A pesar de estar muy cansado. La adrenalina corre por tu cuerpo. Sientes cómo toda tu vida pende de un hilo, tanto que no puedes pensar en otra cosa que no sea correr.

El dientes de sable te pisa los talones. Increíblemente sigues corriendo lo suficiente para que el tigre no te alcance.

corriendo

Mientras corres, afortunadamente encuentras una rama gruesa en el suelo. Rapidamente la recoges del suelo y sigues corriendo, pero ya en tus últimas.

Por fin sales del bosque. Pero ¡OH NO!

No hay más camino. Estás arrinconado. Frente tuya hay un barranco y no tienes más salida. Volteas y ves al tigre, preparandose para cazarte.

barranco
Te encuentras en un gran aprieto y debes pensar rápido.
¿Qué decides?