El tigre vuelve a la defensiva. Tus brazos no son suficientes para ahorcar a la bestia.
Te muerde los brazos y termina comiendote a ti y a la otra persona.
El tigre vuelve a la defensiva. Tus brazos no son suficientes para ahorcar a la bestia.
Te muerde los brazos y termina comiendote a ti y a la otra persona.